Hace unas semanas te contamos que nos fuimos de México pero no te dijimos lo más importante, ¿y a dónde nos hemos ido? Pues a una de esas ciudades que puede presumir de ser uno de los mejores lugares del mundo para vivir, Vancouver! Siguiendo la costa sólo nos hemos desplazado unos 3900 km al norte, que nos hubiese encantado hacer en una furgo pero como no tenemos, lo hicimos en avión. Vancouver es la ciudad más importante del oeste de Canadá y su área metropolitana es la tercera más poblada del país. Es una de las ciudades con mejor calidad de vida del mundo pero también una de las más caras para vivir y después de 2 años en México vaya si lo hemos notado. También hemos cambiado el español por el inglés, la tranquilidad de un pueblo por el ajetreo de una gran ciudad y el calor y la aridez de los Cabos, por el verde y la lluvia de Vancouver aunque ahora que es verano, la verdad es que el clima es una pasada!

Tomar la decisión de venir a Canadá no fue nada fácil. Somos conscientes que vamos a echar de menos un montón de cosas de México pero también sabemos que nos esperan muchas cosas positivas y eso es lo que nos ha motivado a cambiar de aires una vez más ;P ¿Y por qué Canadá? Pues decidimos venir a Canadá porque aún teníamos la opción de usar la
Work & Holiday Visa que conseguimos en 2015. Como tienes un año para activarla desde que te la dan, ya estábamos casi al límite de perderla así que en junio vinimos a activarla. Carlos ya se quedó en Vancouver y yo, Silvia, volví a los Cabos a terminar el curso para luego volar de nuevo a Canadá.

Ahora ya han pasado más de dos meses desde que aterrizamos los dos por primera vez y después de dormir unas cuantas noches en habitaciones mediante la plataforma Airbnb (muy popular aquí en Vancouver), alquilar una habitación en una casa durante una semana y vivir 2 meses en un pequeño apartamento en la ciudad de New Westminster, por fin hemos dado con un lugar en el que nos sentimos cómodos y a gusto, un apartamento de 1 habitación en el centro de Richmond, una ciudad al sur de Vancouver separada por el río Fraser. Nos hubiese gustado tener una habitación extra para invitados pero los precios de los alquileres son una auténtica locura. ¿Adivinas cuanto pagamos por el nuestro? 1.150 dólares!! Eso sí, el sofá que hemos comprao es super cómodo ;P

Como en todos los inicios cuando te mudas a un país nuevo lo más difícil fue la primera semana aunque esa etapa de estrés esta vez le tocó vivirla a Carlos. La idea era encontrar un lugar donde vivir temporalmente y un trabajo para luego buscar otro lugar con más calma. Para darle más emoción al asunto nuestros ahorros estaban bajo mínimos pero por suerte en menos de una semana Carlos ya estaba trabajando cargando y descargando camiones. Aquí en Vancouver hay trabajo, en cierto modo nos recordó a la época dorada de España antes de la crisis cuando entrabas a una ETT y salías con un trabajo (o dos) bajo el brazo. Eso si, tienes que estar dispuesto a trabajar de lo que sea, como era nuestro caso.

Y por mi parte, me puedo considerar suertuda porque antes de venir ya había hecho algunas entrevistas con escuelas Montessori de aquí, cuando vine en junio las visité, a la vuelta ya firmé el contrato con una de ellas y ahora ya estoy trabajando!. No está siendo nada fácil conseguir todos los certificados que necesito para enseñar aquí en British Columbia, pero la verdad es que estoy contenta de poder trabajar de Guía aquí en Canada.

Así que de momento la primera impresión es buena. Vancouver es una ciudad con todas las comodidades del primer mundo, transporte público en condiciones, calles arregladas, servicios públicos, unas bibliotecas impresionantes, parques, árboles y verde por todas partes. Está situada en un bonito enclave, rodeada de agua y las montañas como telón de fondo aunque la verdad es que tampoco nos ha sorprendido ni nos ha decepcionado,
es básicamente como nos habíamos imaginado que sería Vancouver. Eso sí, hemos de tener en cuenta que estamos viendo la ciudad en pleno verano, con sol y cielo azul casi todos los días aunque esto cambiará dentro de unas semanas cuando empiecen las lluvias, esté gris todo el día y se haga de noche a las 4 de la tarde. Para entonces ya os contaremos si hemos cambiado de opinión ;P